Lionel Pedrique Orta: Una escuela para 

desarrollar la segunda mirada

Por: Arnaldo Ramón D' Yongh Sosa

Artículo anecdótico

San Cristóbal, estado Táchira, Venezuela, 08 noviembre 2023

Lionel Pedrique Orta: Una escuela para 

desarrollar la segunda mirada

Hablar de Lionel Pedrique Orta es un verdadero compromiso, no solo por lo que representa, sino porque que realmente las palabras se quedan cortas cuando queremos dedicar unas líneas a una persona tan especial.


Lionel es un amante de la buena gastronomía,  y por lo general, un excelente restaurant suele ser un espacio donde ambos compartimos como hermanos y amigos, disfrutando por ejemplo de un rico minestrone, un buen centro de lomito y un magnifico tiramisú, ocasión que es propicia para abordar cualquier tema de conversación, y evidentemente, para nutrirse de las bondades y exquisiteces que rodean su verbo.


Lo sui géneris de Lionel Pedrique Orta se encuentra en la esencia de su ser, cargado de la sencillez que lo caracteriza, siempre está expandiendo Luz para hacer brillar el alma de aquellos seres que necesitan fortalecer sus vidas para avanzar en el camino tan complejo de este mundo contemporáneo. En estos momentos cíclicos que vive el planeta en general, la intelectualidad mezclada con la espiritualidad, es justamente el engranaje encriptado de la potente energía que irradia Lionel.

Es un venezolano nacido en la ciudad de Caracas un miércoles 19 de octubre de 1949, y con firme convicción, es una de las mentes más brillantes con las que cuenta Venezuela y América Latina, e inspirado en el pensamiento del Doctor José Manuel Briceño Guerrero, su querido maestro, se ha dedicado a lo largo del tiempo al estudio de temas relacionados con la esencia y la existencia del ser humano.


Lionel formó un lindo hogar con su esposa Luisa Emilia López, mi querida cuñada, como suelo decirle, quien por cierto es Licenciada en Antropología egresada de la Universidad Central de Venezuela (UCV), y quien luego recibió su título de Doctora en Romanística y Etnología por parte de la Universidad Albert Ludwig, Freiburg, Alemania. Entre ellos procrearon dos hijas, ambas profesionales reconocidas en sus respectivas áreas, y hoy día, tanto Lionel como Luisa disfrutan del legado que ellos mismos han forjado a lo largo del tiempo, vale decir, una gran familia y el fomentar a través de diversas actividades la academia, el respeto por la dignidad humana, el crecimiento evolutivo del hombre y sobre todo el desarrollo espiritual.


Lionel es Filósofo y Sociólogo egresado de la Universidad Católica “Andrés Bello” de Caracas, así como también, es egresado como Licenciado en Filosofía y Griego Clásico de la Universidad de Freiburg, Alemania. Posteriormente se recibió como Doctor en Filosofía, Sociología y Griego Clásico en la Universidad de Freiburg, Alemania, y su tesis Doctoral versó sobre el fundamento ontológico existencial de la Lógica, como determinante de la cientificidad en la filosofía de Martin Heidegger, intitulada: “La temporalidad de la lógica”, bajo la tutoría del Profesor F-W von Herrmnn, asistente privado de Martin Heidegger, siendo este último uno de los filósofos más reconocidos del siglo XX, nacido el 26 de septiembre de 1889 en la ciudad de Messkirch, Alemania; y quien ejerció la rectoría de la Universidad de Freiburg, casa de estudios superiores donde se reafirmó el compromiso de Lionel Pedrique Orta por la academia. Lionel es profesor titular jubilado del Departamento de Sociología y Antropología de la Universidad de Los Andes (ULA Mérida). Durante su estancia en la ULA Mérida, se desempeñó como Coordinador del Grupo de Investigaciones Filosóficas, adscrito al Centro de Investigaciones en Ciencias Humanas (HUMANIC) de la Facultad de Humanidades y Educación de la Universidad de los Andes.

Entre otras cosas, Lionel es autor de diversas obras escritas que han recorrido gran parte del mundo, asimismo, sostiene diversos seminarios de investigación sobre fundamentos del pensamiento filosófico, científico y de la cultura. De igual manera, y adjunto a la actividad investigativa, promueve la realización de talleres orientados a la reconversión de la conciencia, como instrumento de una comprensión de sí mismo en función de la actualidad vital, como aplicación a nivel participativo-individual de los resultados de diversos trabajos y estudios realizados sobre Kant, Husserl y Heidegger, y de su utilidad, al campo de la ciencia en general y de la conducta respectivamente (sociología, psicología y psiquiatría).


De igual manera, ha tenido una dilatada y reconocida trayectoria en el foro intelectual venezolano, que lo hace gozar de un gran prestigio a nivel global, y muchos de sus discípulos, se encuentran esparcidos por la faz de la tierra, destacándose como hombres y mujeres exitosos, portadores de una escuela que te muestra como "desarrollar la segunda mirada" - enseñanza de vida del Doctor y Maestro José Manuel Briceño Guerrero que tiene como propósito educar y disciplinar al ser humano en la constante tarea de inquirir desde varias ópticas un hecho, suceso, evento o acontecimiento en particular, que le permita razonar sobre el punto con profunda sabiduría -, pero sobre todo, seres humanos con una capacidad especial para valorar la vida, preparados con las herramientas necesarias para enfrentarse a cualquier escenario personal, profesional, laboral e institucional sin emitir juicios sino aceptando las circunstancias con un nivel de conciencia más alto.

En otro orden de ideas, tanto Lionel como yo, coincidimos en que ambos formamos parte del mundo científico y académico, pero además, también pertenecemos a una institución de estudios “filosóficos” donde lo más importante es ser un hombre libre de pensamiento y de buenas costumbres, donde la práctica de las virtudes sencillamente no se ve como algo extraordinario sino como tan solo el cumplimiento de un deber, y si enumeramos algunas de las cosas que compartimos y disfrutamos es justamente escribir, reflexionar sobre el despertar de la conciencia, valorar las acciones para lograr la transformación personal, y entre otras cosas, interpretar la infinita simbología que nos ofrece el cosmos en el proceso iniciático de la vida del hombre en la tierra, es decir, compartimos una escuela donde lo importante es sumar y multiplicar, que a mi parecer forma parte de la misión que tenemos como seres humanos en este mundo, buscando y compartiendo el progreso, dejando bases firmes para la generación de relevo, y haciendo introspección sobre la búsqueda constante de la verdad, porque tal como lo dijo Martin Heidegger: “La verdad es lo que hace a un pueblo cierto, claro y fuerte”.


Un día con Lionel Pedrique Orta es indescriptible, está lleno de gratas sorpresas, la forma de expresar sus ideas siembra esperanza, el ambiente se torna cálido, el contexto amigable, un confort espiritual te inunda el corazón, y la visión se reduce a observar con atención su forma tan elocuente para conducir la conversación. El sosiego del que goza siempre te deja una enseñanza, un “como iniciar nuevamente”, un atisbo de optimismo, y sobre todo, una demostración de amor por la humanidad; en otras palabras, el “tiempo” cuando estas con él pasa a un segundo plano, te concentras en el presente y olvidas el pasado sin pensar tan siquiera en el futuro.

En esos momentos de regocijo intelectual, es cuando te das cuenta que el tiempo per se pudiese no existir, sino que sencillamente sus manifestaciones se hacen sentir, porque a mi modo de ver las cosas, el hombre se ha concentrado en ser esclavo no del tiempo sino de su instrumento de medición - el reloj - (Norbert Elias, 1989), porque la sociedad en su proceso evolutivo ha venido creando elementos para controlar al hombre en función de las actividades, olvidándose por completo de lo mucho que puede hacer con tan solo “dejar fluir”, pero bajo la excusa de que “el tiempo es oro” deja de disfrutar los momentos que la vida le ofrece en magnificencia. 


En palabras del mismo Lionel en su artículo académico intitulado “Al rescate del tiempo. Una aproximación a la relación entre Filosofía y el despliegue societario del hombre, a propósito del tiempo”, el cual, fue publicado en “Fermentum”, Revista Venezolana de Sociología y Antropología, vol. 18, núm. 52, mayo-agosto, 2008, pp. 333-342 de la Universidad de los Andes, Mérida, Venezuela:


 “La autorregulación de los hombres, en un sentido tanto “individual” como “social”, avanzó conjuntamente con el crecimiento de cambios estructurales de la sociedad. Dentro de ello, pues, también la determinación del tiempo como un medio de regulación y un medio de orientación del hombre en su sociedad.”


Ahora bien, la sapiencia es una de las virtudes que especialmente se destaca de la personalidad de Lionel, que bajo una dicción armoniosa la comparte generosamente, y cuando el melifluo de sus palabras se hace sentir, va fluyendo de manera inefable un intercambio de energía sutil que embarga y alimenta a todos los sentidos, y al interiorizarse ésta, se hace inmarcesible la vivencia, incluso, a medida que se va desarrollando un tema de interés con él, se hace presente una especie de serendipia que alberga el alma con total plenitud, haciendo que la misma perciba una serena epifanía.


Quienes hemos compartido cualquier tipo de encuentro con Lionel Pedrique Orta, tenemos la fortuna de haber sido un dichoso recipiendario de diversos cúmulos de conocimientos y anécdotas, que algunas veces, se han manifestado de manera lacónica, y en otras, con dilatada proyección, sin embargo, en ambos casos, no queda otra opción que ensimismarse para darse la oportunidad de procesar toda la experiencia.


En estos momentos tan dinámicos que vive la humanidad, la misma precisa tener cambios para estimular un despertar de las conciencias, pero para lograrlo, es necesario hacer un trabajo trascendental, que le permita a la misma conciencia ser el lugar de encuentro entre lo material y lo espiritual, elevándose de esta manera a mundos superiores para lograr la ataraxia que el hombre tanto demanda, por eso considero, que la visión acendrada y compasiva de Lionel Perdrique Orta, constituye un punto de motivación activa sempiterna para obtener el objetivo deseado.

Lionel ha representado a Venezuela en numerosos eventos internacionales, y en cada uno de ellos, su participación se destaca plenamente. Es un hombre que ha desarrollado discursos en español, inglés, alemán, entre otros idiomas, y sus intervenciones con elocuencia dejan siempre en alto el nombre de nuestro amado país, logrando constantemente cautivar al público presente, fomentando y motivando en ellos el crecimiento personal ante una sociedad tan accidentada como la actual. 


Hoy día, se encuentra radicado entre la ciudad de Mérida y la de Caracas (Venezuela), sin embargo, su verdadero hogar es el templo de su conciencia, donde las fronteras no existen, y donde su transitar deja huellas imborrables. 


Es menester exteriorizar con profunda convicción, que a través de este artículo anecdótico, he querido brindarle un sencillo homenaje y dedicarle un espacio de reconocimiento en vida a un querido hermano y excelente amigo, con quien probablemente, haya compartido o convivido en vidas pasadas formidables experiencias, y que en esta oportunidad, el destino nos volvió a reunir para disfrutar lo bello de la existencia, olvidándonos del “tiempo”, porque sencillamente somos parte de un todo creado por un arquitecto constructor, que hace vida dentro del corazón de cada ser.


Con afectuoso sentimiento de cariño, respeto y consideración para mi querido hermano y amigo Lionel Pedrique Orta, desde la piedra filosofal de mi nivel de conciencia.


Tu querido hermano y amigo.


Arnaldo D’ Yongh.


San Cristóbal, estado Táchira, Venezuela, 08 de noviembre de 2023.